IGUALES
Saltillo, Coahuila de Zaragoza de México
24 de agosto del 2013
Todos los hombres nacen iguales,
pero, es la ultima vez que lo son.
Abraham Lincoln
¿Somos iguales? Sólo en papel lo somos, todas las leyes,
constituciones, normas, nos dicen que ante la ley somos iguales, MENTIRA es, si
sólo queda en papel.
¿De qué le sirve al indígena que la Constitución lo proteja
si es discriminado por su color o lengua?
De nada, mientras los mexicanos los sigamos viendo como raza
inferior, como tribus del pasado, sólo los mostramos para que vengan los
turistas y compren souvenirs, si se pudiera los venderíamos como recuerdos de
Chiapas o Oaxaca.
¿De qué le sirve a la mujer que diga la ley que ante ella
está en igualdad de condiciones con el hombre?
De nada, mientras siga viviendo violencia, desigualdad en el
empleo, en las casas, en las escuelas, en la calle, quien le pega, viola o
denigra a una mujer lo hace a todos, de ellas venimos todos.
¿Cuántas mujeres han visto que pierden su vida y su libertad
sexual por ser mujer, y la ley que es “igualitaria” a la hora de que sea
aplicada por un ser humano la vuelve desigual?
¿De qué sirve a la comunidad lésbico-gay que la Constitución
les dé su manto protector?
De nada, siguen siendo víctimas de la moral, de las “buenas
costumbres”, de las religiones, de tabúes, el amor entre dos seres humanos no
es ningún delito. Si vestirte como quieras es criticado, renegado y
discriminado, si expresas tu amor en la calle, eres señalado.
¿De qué les sirve a los adultos mayores que se digan
discursos y se derrochen litros de tinta en normas que los protegen?
En nada, porque la mayoría aportó trabajo y amor por un país
que prefiere tenerlos olvidados o, peor aún, trabajando en condiciones poco o nada
dignas para ellos, con pensiones raquíticas e insultantes, pero, si fueran bancos ya los hubiéramos salvado
(parafraseando a Galeano)
Las personas con capacidades diferentes que no pueden ir de
un lado a otro de nuestras ciudades porque no tienen las condiciones necesarias
para hacerlo, seguramente cuando leen las leyes, se ríen y creen que eso sólo
sucede en una realidad alterna a la nuestra. Creemos que con tenerles un lugar
de estacionamiento especial ya cumplimos.
Las personas que viven bajo condiciones de pobreza, que no
alcanza para comer, ¿creerán que la protección casi divina de la ley es
verdadera? no, no se han generado las condiciones las oportunidades para que
todos podamos decir que este país es parejo con todos sus ciudadanos.
Hay quienes dicen que hasta en los animales hay razas, sí,
para el perro todos los demás son perros, al perro no le importa si es pastor
alemán o chihuahua, nosotros los dividimos y los diferenciamos por su “raza”,
para el león todos son leones. ¿Entonces, qué nos diferencia de los animales?
Otros podrán pensar que hay jerarquías, claro, las hay. La
mayoría de nosotros estamos arriba o abajo jerárquicamente de alguien, eso no
te da derecho a ser desigual, ni oprimir o esclavizar, violar, golpear o matar
a alguien. Sí hay jerarquías, pero no es sinónimo de desigualdad.
Mientras existan esas diferencias, violenten a la mujer,
discriminen al indígena, releguen a los adultos mayores, ignoremos a las
personas con capacidades diferentes y juzguemos a los gays, no, no podremos ser
iguales.
¿Somos iguales? No, aún no.
tobiashdz@hotmail.com
@AbrahamTobias